Los ex-alumnos de Sei son la prueba de que el programa funciona.
Con los miles de jóvenes atendidos a lo largo de los años, estamos orgullosos de ser testigos de su transformación en adultos positivos que contribuyen a la sociedad. SEI se esfuerza por proporcionar un camino para que los ex-alumnos se reconecten con sus compañeros, se vuelvan a comprometer con el programa y reinviertan en la comunidad.